LA PRIMAVERA Y LAS CONTRACTURAS. Una visión Natural

Llega la primavera y la consulta se “llena de contracturas” como el campo de flores. Cuello (Tortícolis), espalda (lumbagos), piernas, tendinitis, tics nerviosos… ¿tendrá alguna relación? Como siempre desde una perspectiva mecanicista ninguna, pero desde las terapias naturales sí vemos esa relación.

Según la Medicina Tradicional China (MTC) la primavera es el período del año donde la energía del Hígado y la Vesícula Biliar están más activas, es el tiempo de la Madera. Esta metáfora de la Madera sirve para entender que la primavera es la época donde todo crece, la energía se desborda y la Naturaleza “explota” llenándolo todo de color; y nuestros cuerpos, “hijos” de esa Naturaleza, también sienten como ese torrente de energía brota en su interior, a menudo de una manera incontrolable.

Y es esta energía incontrolable la que nos hace presa de las alergias, que es el malestar típico de la primavera, pero también de las contracturas, uno de los problemas más comunes en la consulta de Osteopatía durante estos meses. La manera de tratarlas pasa, además de por la sesión de Osteopatía propiamente dicha, en la que se realizan las elastificaciones, estiramientos, manipulaciones, así como puntos gatillo para reducir las contracturas, por un tratamiento integral de limpieza hepática con el objetivo de regular y calmar la energía del hígado para que no desborde la capacidad del sistema muscular de gestionarla. Un ejercicio moderado y una buena alimentación, además, con productos vegetales en su mayoría y de procedencia ecológica, para evitar pesticidas y fertilizantes que ensucian nuestro cuerpo, será determinante si queremos evitar estos dos males de la primavera, las alergias y las contracturas.